jueves, 10 de septiembre de 2009

Ballini con plata para salir en los medios pero no para los trabajadores


Entrevista exclusiva de AGENCIA SUBURBANA
El dueño de Filobel-Febatex rompe el silencio con declaraciones contundentes

Acompañado por dos de sus empleados, Rubén Ballini propietario de Filobel-Febatex se mostró preocupado por las agresiones sufridas por él y sus empleados, y le reclamó a la Justicia que garantice el libre acceso a la planta fabril. Afirmó que el intendente Gutiérrez no coincide en la creación de una cooperativa sobre una fábrica en funcionamiento, y descartó toda posibilidad que el Senado apruebe la Ley de expropiación

Foto: Rubén Bellini (centro), acompañado por los trabajadores Carlos Dieguez (izquierda) y Angela Barea (derecha)

- ¿Cuál es la situación actual de Filobel-Febatex?

- Luego del desalojo nos restituyeron la fábrica, y desde antes del 13 de agosto hemos intentado en varias oportunidades ingresar a ella pero nos encontramos con el hostigamiento permanente de la gente que ahora está acampando en la puerta, quienes impidieron hasta el viernes pasado abrir el portón de la fábrica porque estaban asentados justo frente al portón, y en las dos oportunidades que fue la empresa Edesur a reconectarnos la energía ellos han amenazado al personal para que no hagan la reconexión -esto ocurrió el viernes 4 de septiembre y en el día de ayer, martes-. En esta oportunidad estaba dentro de la fábrica cuando vino la gente de Edesur a conectar la media tensión y cuando quisieron acceder al tablero externo se lo impidieron amenazándolos nuevamente, y como la Policía tiene órdenes de no reprimi optaron por irse nuevamente. De todos modos la empresa aseguró que regresarán a hacer los trabajos pero con Gendarmería de custodia.

- ¿Está funcionando la planta?

- No, porque no hay energía. No obstante a eso, nos hemos juntado en el Sindicato con todos los trabajadores (30 en su totalidad) para abonarles la quincena y avisarles que prontamente retomarán sus puestos de trabajo una vez reconectada la energía. Lo que si pedimos es que la Justicia nos garantice nuestra libertad de ingresar y salir de la fábrica tranquilamente porque hemos sido verbalmente y, peor aún, físicamente agredidos: nos han arrojado todo tipo de elementos, nos han agredido a golpes de puño. La señora (Angela) Barea -que está aquí con nosotros- fue agredida la semana pasada cuando subía al colectivo, junto a otros dos empleados de la fábrica. La realidad es que hoy estamos tratando de preservar la integridad física de todos los trabajadores. No están dadas las condiciones para ingresar hoy a la fábrica con seguridad.

- ¿Cree que va a ser expropiada la empresa por el Senado Bonaerense?

- No, de ninguna manera. No hay ninguna posibilidad que una fábrica que está funcionando sea expropiada. Esto nace por un proyecto de Ley que fue presentado cuando la fábrica estaba en pleno proceso de producción. Acá no estamos hablando de una fábrica abandonada, ni que estaba concursada, ni en quiebra. Estaba en pleno proceso de producción con 30 puestos de trabajo y con sus salarios al día. Entonces no hay nadie que pueda avalar que se expropie una empresa y declararla de utilidad pública cuando la fábrica está funcionando.

- ¿Pudo hablar con algún senador?

- Hemos hablado con algunos senadores y con los que charlamos están en desacuerdo de votar una Ley de expropiación sobre una fábrica que estaba funcionando.

- ¿Pudo dialogar con el intendente de Quilmes Francisco Gutiérrez?

- Hemos tenido una reunión con el intendente Gutiérrez. Nos ha apoyado hasta este momento con nuestro reclamo. El no coincide -justamente- en que se arme una cooperativa sobre una fábrica que estaba en marcha porque además desde el 10 de febrero que ellos han tomado y usurpado la fábrica hasta la fecha han mantenido la fábrica parada, no han producido, han hecho algunas cosas colgados de la luz.

- ¿Está de acuerdo en sentarse a dialogar con los cooperativistas?

- Les hemos ofrecido en varias oportunidades. Hemos tenido reuniones con el Padre (Luis) Farinello para que medie en esta situación y, jamás quisieron dialogar, se les ofreció reincorporarlos al trabajo y no han aceptado...

- ¿No han hablado del pago de las indemnizaciones?

- De hecho en el mes de abril, se dictó una conciliación obligatoria donde hubo oportunidad de sentarse a charlar, ya sea del pago de las indemnizaciones para aquel que no quisiera seguir trabajando o para volver a trabajar aquel que lo deseara.

- ¿Cómo imagina el futuro?

- Trabajando. No hay otra posibilidad. Cada vez estamos más cerca de eso...